Somos Juan y Jimena, una pareja de arquitectos. Un buen día, decidimos abordar el problema de sacar del olvido un viejo palacio familiar, sin sospechar que tal decisión cambiaría el rumbo de nuestras vidas.
Entre los años 2.003 y 2.006 restauramos este palacio de principios del S.XVI, para abrir sus puertas a viajeros y trotamundos. A partir de entonces, combinamos el ejercicio de la arquitectura con el cuidado y mantenimiento de este edificio, de la huerta y granja ecológicas y del jardín, nuestra particular felicidad.
La atención a nuestros huéspedes, labor que hacemos con ilusión, da finalmente sentido a todo este gran proyecto vital.
Gracias a ellos, a vosotros, el palacio de Hoyuelos palpita de nuevo.